Hola de nuevo, vuelvo con mucha energía esta temporada y quiero contagiártela a tope, y es que hoy te propongo una especie de autocoaching casero. (sumado a la satisfacción de hacértelo tú mismo, que sienta mil veces mejor)
Se trata de una banderola DIY motivadora para coger “la vuelta al cole” con ganas, en la que la palabra DUDA se ha transformado en un poderoso HAZ.
Empezamos ¡ACCIÓN!
De paso, el tutorial sirve para repasar el mundillo de las entretelas y de las maravillosas fliselinas (A.K.A. “qué palo me da coser”) jejejeje 😉
Tan sólo tendrás que reservarte una horita larga y juntar estos materiales:
- Tejidos no elásticos. Aquí se han reutilizado un pantalón de hace varias temporadas que ya no se usaba y una blusa de Rollitoasí,(que una clienta enganchó)y dejó de poder estar a la venta.
- Un tubo de cobre o cualquier tipo de palo, rama o vara en su defecto.
- Un cordel bonito.
- Descargarte esta plantilla.
- Fliselina de doble cara a metros y en tiras
- Entretela adhesiva (sólo por una cara)
- Tiza de sastre, tijeras, plancha, regla y adhesivo rápido.
Comienza cortando una pieza de 35 x 42cm de tela y también de entretela termoadhesiva.
Por cierto, si no tienes el placer de conocer este material, aquí puedes introducirte en el extenso universo de las entretelas para descubrir en qué puede ayudarte.
A continuación, plancha a tope, encara el revés del tejido con la parte adhesiva de la entretela y plánchalos.
Así habrás conseguido que el tejido se estabilice y tenga más cuerpo. Incluso si estuvieras trabajando con un algodón tipo loneta con mucho cuerpo, te recomiendo que igualmente le añadas la entretela para que la banderola se vea más consistente.
Después, haz los dobladillos por todo el perímetro de la pieza usando tiras de fliselina. ¿La recuerdas? Si has comprado alguna cortina en Ikea, seguro que incluso ya las tienes por casa 😉
Es una alternativa al coser que funciona divinamente para este tipo de proyectos.
Y cuando tengas los bordes rematados, crea el pico inferior de la banderola sujetándolo también con tiras de fliselina.
Seguimos. Descarga la plantilla, imprímela en una hoja autoadhesiva y úsala para cortar el texto y un par de líneas, tanto en tela como en la fliselina a metros de doble cara.
Habrás creado una especie de parches con el texto. Para fijarlo a la banderola tan sólo deberás posicionar cada letra de tela sobre la misma de fliselina y plancharlas.
¡Fácil, fácil!
Vuelve a usar la tira de fliselina y la plancha para crear el dobladillo sobre el tubo de cobre que una ambas piezas.
Y añade con un puntito de cola, un bonito cordel a cada extremo del tubo. Con él podrás colgar tu súper banderola.
¡Enhorabuena, ya la tienes!
Me encanta el aspecto “despeluchao” de los apliques con el texto porque hace que resalten más.
Eso sí, en esto de la “salud mental DIY”, cada cual sabe en qué necesita su particular empujoncito. ¿Algo más de autoestima? ¿Mejor algo de pasotismo quizá?
Pues adapta el mensaje y listo.
Por si te motiva, estas son unas cuantas ideas con las que puede que también conectes. ¡Yo desde luego las usaría para banderolas, camisetas y hasta para tatuajes!
Te dejo con sus fuentes y unos cuantos mensajes extra más a modo de inspiración, aquí.
Y mientras revoloteas por el anterior enlace cargándote de ideas, me quedo empapándome de la energía activadora de mi nueva la banderola. 🙂
Así da gusto seguir cerrando el círculo de la ropa que consumimos.
¿Te ha gustado? Pues cuélgala en un lugar bien visible y funcionará como reminder o “colleja mental” para que no pierdas el foco.
Ideal para todos los que sabemos la lección, pero necesitamos que nos la recuerden para no seguir dándonos de bruces con lo mismo.
Un beso y ¡Hasta el próximo capítulo!
Tutorial de 2nd Funniest Thing para Rollitoasí.
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